domingo, 16 de agosto de 2015

Nozomi, esencia japonesa en Valencia

Nozomi significa "la ilusión de un sueño cumplido"...Así nos lo transmitió José Miguel, fundador junto a Nuria de este fantástico restaurante japonés en en el barrio de Russafa en Valencia.


Llevábamos un tiempo deseando degustar comida japonesa de calidad y además teníamos algún que otro "logro" que celebrar, así que nos dirigimos a Nozomi Sushi Bar  para saciar nuestro capricho. Y lo cierto es que fue una decisión mucho más que acertada, genial elección!

Al adentrarnos en el restaurante, de pronto, nos vimos paseando por una callejuela de Kyoto...

Fotografía de Nozomi Sushi Bar

Nuestras ansias por probarlo todo nos llevaron a elegir el menú degustación (mira que nos gusta esa palabra jejeje), que se presentaba muy completo y apetecible.

Para abrir boca, mientras nos traían un vinito blanco que acompañaría de maravilla la cena, nos ofrecieron un snack de piel crujiente de lubina.



Dando comienzo al menú, una decisión: ¿Sopa o ensalada? Al ser dos, la mejor solución es uno de cada. La sopa de miso muy sabrosa y la ensalada de algas refrescante.



Por cierto, decidimos cenar en la barra. Muy cómoda y amplia como el resto de mesas del lugar, pero con la ventaja de poder observar muy de cerca el trabajo y armonía de cocina. Además. contábamos con un ambiente íntimo y agradable a la par de sentirnos acompañados y aconsejados en cada momento por el equipo de cocina y sala, todos muy amables. 



La chef situada frente a nosotros fue la encargada de preparar esta delicia de tartar de salmón.


Uno de los más exquisitos platos fue el usuzukuri de lubina con trufa blanca. Espectacular!


Bueno, bueno, la cosa cada vez va a mejor, este fue otro de los platos estrella de la noche: magnífico sashimi de calamar, gamba y vieira con alga codium para finalizar (sí que sabía a percebe, sí).


A continuación, seguimos alucinando con la variedad de sabores y texturas de la cocina de Nozomi. Vamos a por tres piezas de nigiri: salmón, jurel y pez mantequilla. Mmm, seguimos recordándolas...Excelentes!



Los "clásicos de la comida japonesa en occidente" nunca fallan y estos muchísimo menos. Menuda delicia!. Maki y uramaki para seguir deleitándonos. Un gusto contemplar su delicada y precisa elaboración.


Fotografía de Nozomi Sushi Bar

Como colofón, uno de los grandes: temaki en todo su esplendor.


Y para acabar con la orgía gastronómica japonesa, un curioso y sorprendente postre.


Una velada única en un lugar precioso, disfrutando de maravillosos manjares en un ambiente muy dinámico y francamente agradable. Volveremos para descubrir el resto de sorpresas que esconde Nozomi.

Sin duda, un sueño hecho realidad. 

viernes, 7 de agosto de 2015

Qué padre Taquería La Llorona!

Hace una semana fuimos a cenar a Taquería La Llorona , lugar al que hacía ya tiempo que queríamos ir, ya que conocemos el otro local del chef Jose Gloria: "Salaet i Bo"  y nos encanta. Además, nos lo habían recomendado nuestros amigos y nos picaba el gusanillo.


Este bonito restaurante mexicano ubicado en el barrio de Ruzafa es moderno, acogedor y con pinceladas de la cultura mexicana en su decoración.

Foto de Taquería La Llorona

La Llorona, como su nombre indica, tiene una especialidad: los tacos. Y ofrece en su carta una amplia selección de los mismos entre otras delicias (unas pican y otras no XD ).

Para aliviar la sed elegimos cerveza rubia mexicana Modelo, refrescante e ideal para acompañar la cena.  Había otras opciones (para las próximas veces jeje): cerveza negra, margarita, etc.


Como nos recomendó nuestra amiga Ana, para empezar nos decidimos por un cóctel de camarones que estaba espectacular, cuyos ingredientes principales eran camarones, aguacate, cilantro y un aliño muy fresco y sabroso. También unas sorprendentes quesadillas.


Empieza la sesión de tacos... Y llega a nuestra mesa una bandeja con lima y tres salsas para aderezarlos al gusto. La primera era de tomate verde y las otras dos de chile, una con los ingredientes cocinados (chile quemado) y la otra en crudo.


Cuando el taco aterrizaba ante nosotros, al menos unos mordiscos sin salsa alguna y luego a probar diferentes combinaciones, que le dan diferentes matices según las mezclas.

Optamos por pedir 3 tacos para cada uno y estas fueron nuestras elecciones:

- Tacos de pescado (carne de tiburón con verduras).

- Tacos de carnitas (tierna ternera con coca-cola).



- Tacos de lengua (lengua con cebollita).


Sin duda, una buena amalgama de sabores. Todos buenísimos, pero en especial nos encantó el de lengua. Mmm!
Habríamos probado el resto de platos y tacos de la carta, pero eso será en nuestra próxima visita...
El taco al pastor y el de cochinita pibil lo hemos saboreado en Salaet i Bo y también os los recomendamos.

Aún con la agradable sensación picante en boca, nos endulzamos con un delicioso postre: helado de pistacho con fresas y chocolate. Un buen broche para culminar nuestra cena.


Entre plato y plato aparecían nuevos comensales y sorpresa! Carlos Topchef (Carlos Medina el del alginato, el que congeló la vitro...Un crack!) entró por la puerta y estuvo cenando a nuestra vera, demostrando su buen paladar.

Una excelente velada, con un servicio muy atento, que durante la cena nos explicó amablemente y con detalle cada plato que se posaba en nuestra mesa. Exquisito trato por su parte y la de Jose :) .

Volveremos pronto!!!


domingo, 14 de junio de 2015

Islandia día 8: Trolls y vikingos.

Hoy el día empieza improvisado. Nuestra idea inicial, era haber dormido en Holmavik para disfrutar de sus alrededores, pero como nos alojamos más al sur, tras un buen desayuno, decidimos recorrer la zona de Hindisvik, una pequeña península visitable en coche, donde se realizan diferentes paradas y donde habitan focas y el troll Hvitserkur, una roca que se alza a pocos metros de la orilla. 




En uno de nuestro intentos de avistamiento de focas, tuvimos una ligera trifulca con las aves, las cuales había que espantar sosteniendo un palo hacia arriba para que lo atacaran a el en vez de a nuestras cabezas!



Llegó el momento de cumplir con la  ley islandesa y pagamos nuestra multa en un banco de una pequeña aldea, que nos vino bien bien para ver estos secaderos de pescado, curiosos pero olían fatal.



De vuelta hacia el sur, nos detuvimos en una curiosa tienda de productos artesanales y gastronomía de la zona, donde la simpática dueña nos animó a convertirnos en vikingos. Mirad que fieros!



Aún metidos en el papel de vikingos, llegamos a Hafnarfjördur,  típico poblado vikingo en el que nos explicaron como eran sus vidas y sus costumbres. Muy interesante ver como convivían en un espacio tan reducido toda una gran familia. 



Más hacia el sur, visitamos nuestra última cascada de Islandia: Hraunfossar, De nuevo única y diferente al resto.




A continuación visitamos un pequeño pueblecito llamado Reykholt con una preciosa capilla y antiguas viviendas islandesas, todo ello en una zona de aguas termales.




Cerramos el círculo, reencontrándonos con trolls como por la mañana, en el Troll Garden, Y desde allí a nuestro hostel en Borgarnes.



Islandia día 7: Relax en el Norte.

Se estaba tan bien en la cabaña de Dalvik, que decidimos hacer un alto en el camino y darnos una mañana de relax, en la que no madrugar y disfrutar de una de las "atracciones" del pueblo: la piscina. Estaba lloviendo lo cual hacía aún más divertida la visita a la misma, pero cual fue nuestra sorpresa al llegar y comprobar que era un mini parque acuático con piscinas a distintas temperaturas (de frío extremo a calor extremo) y un buen tobogán. 

Hacia el mediodía continuamos nuestro trayecto. Primera parada: Akureyri, segunda ciudad más grande del país. Un lugar con bastante vida. 






Fuimos caminando desde sus calles principales, adentrándonos en su iglesia (muy parecida a la de Reykjavik aunque mucho más pequeña) hasta el jardín botánico (Lystigadur), el más septentrional del mundo. Pequeño, bonito y florido, lo cual destacaba con otros de los paisajes que habíamos visto hasta el momento. 




Tras un picnic en el propio jardín y detenernos en una librería repleta de ejemplares de todo tipo, nos dirigimos a la pastelería más famosa del pueblo por sus deliciosas tartas y cafés: Kaffi Ilmur. Mmmmm ñam ñam.


Regresamos a nuestro coche con tal de seguir la ruta y sorpresa: Multa al canto! Por aparcar en zona de vecinos...Pero es que ya nos sentíamos un islandés más...Menos mal que no era muy cara...

Nuestro plan para la tarde era visitar dos pintorescos pueblos de la zona. El primero, Hofsos,un precioso lugar, típico marinero donde se mezclaban casas coloridas con antiguas casas de color negro, todas ellas de postal.



Y a continuación Holar, donde había una de las universidades de Islandia, cosa que llamaba la atención para lo pequeño que era. También destacaba un bonito campanario.